Entre Música, congruencia y arte… ¿Hasta dónde se revienta la cuerda?
San Luis Potosí, S.L.P. a 5 de Junio 2014
Había estado leyendo y observando una generosa y copiosa lluvia de opiniones y
comentarios, algunos muy bien sustentados y otros…una gran mayoría solo
producto de una falta total de argumentación sobre la polémica desatada en la
red social del Facebook, en San Luis
Potosí.
El tema principal se circunscribe a la discusión
ética/profesional de algunos excelentes músicos con gran trayectoria y
reconocida capacidad quienes expresan
desde su muy particular punto de vista o experiencia la controversia de tocar “covers”
, “tributos” u olvidarse de estos y tocar solo música original o de autor.
En verdad se calentaron los ánimos entre los distintos
protagonistas y seguidores de ambas
posturas, para algunos muy radicales. Para quien esto escribe, solo me resulta un tanto inútil el debate sí
no es posible llevarlo a un escenario social… un escenario que permita ampliar
las visiones encontradas de todos los involucrados.
¿Por qué es necesario
esto?
Tal vez porque en la medida que quienes realmente se
benefician de estas confrontaciones son los mismos que niegan toda posibilidad de desarrollo
social y económico a los músicos potosinos… Hablamos de las Instituciones
oficiales (Gobierno, Ayuntamiento Capitalino, Municipios al interior del
estado, dueños de Bares y antros de moda, Promotores
Privados, etc. pero sobre todo y
lo más lamentable… los propios músicos que solo ven la paja en el ojo ajeno y
no la viga en el propio.
Entiendo y doy la razón a quien con su dinero o sus recursos propios o rentados, promueva
tal o cual tributo, o pague a una banda
por tocar covers en algún antro o centro nocturno… ¡Eso sin duda seguirá por
mucho tiempo! Y siempre habrá por lo
pronto, un público que no le importa
pagar mucho o poco, si lo que consigue es un poco de “entretención”
que le permita evadirse de su triste realidad social… entretenimiento y show
van de la mano, pero…. “Conciencia Social y Arte” ¡Son otra cosa distinta!
Y en ese otro sentido, el Arte y la Conciencia Social son
factores que promueven el cambio tan necesario en un sistema gobernado y
manipulado a su antojo por el Capitalismo Salvaje y las políticas neoliberales
implementadas en este México y otros países latinoamericanos…
Para algunos empresarios y promotores les resulta más fácil
hacerse al modo del sistema con tal de ganar el sustento necesario para su modo
de vida o sustento familiar… tampoco habría que caer en el juego perverso de la
descalificación por el simple hecho de no estar de acuerdo. Cada quien es responsable de sus verdades o
mentiras… tampoco ahí habría vuelta de hoja.
Por otra parte está la postura más radical del creador o artista
que con el paso del tiempo y la experiencia decide dejar atrás todo cuanto ha
hecho anteriormente, incluso negar sus orígenes o renegar de ellos, para buscar
otra forma más congruente con su forma de pensar actual y conforme a la
realidad social… y es ahí donde el Arte y el Artista se fusionan para dar paso
a una visión más crítica, reflexiva y hasta innovadora en algunos afortunados
casos…Todo lo demás sería solo una validación de formas y esquemas hegemónicas
de repetición que solo apuntalan la negación y la falta del sustento ideológico
que realmente genere un cambio en las Políticas
Culturales del Estado. ¿Y si no hay una Estética Social Artística en rebeldía o
re-validada por los demás? ¿Qué nos queda hacer?
Mucho por decir todavía… sin embargo ante esa carencia...
¡Ejecutantes e intérpretes siempre los habrá! Unos
excelentes, otros muy buenos y… ¡Muchísimos más! Que serían
considerados, solo una parte de ese
sector conformado por músicos que a pesar del talento o la capacidad, se
conforman con “huesear”, “coverear” , “tributar”
o simplemente hacer de la música un modo de vida que les permite vivir y ganar
unos pesos y presumir la añoranza del
recuerdo de glorias pasadas o más triste aún… Músicos que tiraron la toalla
porque se dieron cuenta de lo podrido que es el negocio de la música, donde se
pondera la cara bonita y los talentos “pre-fabricados”
para entretener a las masas… Las
televisoras y la radio saben muy bien de esto. Y San Luis Potosí no es la
excepción, pese a ser una ciudad que exporta o deja ir talentos que son
reconocidos ampliamente en otras partes de la República Mexicana y el extranjero…
De eso no hay duda.
También existen otros músicos que a fuerza de estudio y
tenacidad han logrado destacar por su propio esfuerzo sin necesidad de “vejigas
para nadar” o estar pegados a la ubre gubernamental… son más bien pocos y una rara
élite que lo mismo puede un día reconocer el trabajo de los demás que
descalificar sin más ni más a quien
consideran no está a su nivel…
Y por último otro
sector de músicos empíricos, con menos técnica
y conocimiento teórico, aunque si, muy capaces
de crear un tema o canción pegajosa o melodías afortunadas, donde confluyen circunstancias espacio/tiempo
y logran para sorpresa de muchos otros virtuosos, ascender en la escala de valor y
reconocimiento de un grupo, un sector o una sociedad…
Ejemplos en este país y el mundo sobran, no tiene caso
repetir historias…. y aquí entran los que hacen música de todo tipo, género o
estilo… en esta categoría destacan quienes por medio de la música le apuestan a
la recreación y visión de la realidad… poetas musicales urbanos…
trovadores, bohemios trasnochados y muchos
más quienes con un pequeño acervo de conocimiento , técnica y un “atrapa sueños” bajo el brazo, seguirán creyendo en sus propias
posibilidades por más pequeñas que están sean…
Termino esta larga diatriba de hoy, con la certeza de que la
música desde tiempos remotos ha existido
y siempre habrá para todos y todas… música hecha en cualquier circunstancia o posibilidad, música que llene los sentidos y las
exigencias del más experimentado, música que logre traspasar las fronteras y
barreras del idioma y permita hacer de esta incongruencia entre el decir y
hacer de las personas…mejores seres humanos.
Y respecto a la
polémica encarnizada que se ha dado en estos días, pienso que no hay porque
aferrarse a verdades absolutas, cada quien es responsable de sus circunstancias
y asumir sin poses o falsos egos la honrosa responsabilidad que tiene un
creador o un músico de transformar y
crear con su talento y su música, aunque sea por momentos, la posibilidad de tocar las fibras más
sensibles de un ser humano… el peor
enemigo no está allá afuera, el peor enemigo es el miedo latente que vive
dentro de nosotros mismos cuando negamos
la posibilidad de trascendencia de nuestros semejantes.
Antonio Trejo
(Markosblues)
Red Cultura San
Luis.Com